ESTO NO ES UNA TELENOVELA REAL, QUE NADIE SE CONFUNDA. ES UNA HISTORIA IMAGINARIA CREADA POR MI. LAS PERSONAS MENCIONADAS INSPIRAN LA HISTORIA, NO PARTICIPAN EN ELLA. DEDICADA CON TODO MI CARIÑO AL ACTOR Y CANTANTE ADRIÁN RODRIGUEZ QUE ME ENAMORA CON SU TALENTO Y EXPLOSIVA BELLEZA.
viernes, 23 de marzo de 2012
Capítulo 13
Es un día triste para Feli. Arregla a los gemelitos para ir a la boda de su padre con su tía. Por petición de su madre se arregla en el domicilio de sus padres. Juliana viste a la pequeña Soledad con un vestido rosa, muy linda. Por sus hijos Feli sonríe. Feli lleva un vestido sobrio pero elegante que le ha comprado su madre pero se niega a maquillarse e ir a la peluquería. En un momento en el que Feli le está dando el pecho a los gemelitos, Héctor entra en la habitación. La mira con lujuria.
--¡cómo me gustan tus tetas gordas llenas de leche¡ ¡¡cómo las voy a echar de menos¡ ¡¡me parece que me voy a olvidar un poco de lo de ser fiel a tu hermana de momento. Esperame cuando vuelva de la luna de miel¡
Feli se cubre un poco los senos y Héctor se le ríe:
--No tienes secretos para mi. Me conozco tu cuerpo al detalle. Bueno, yo y otros miles. No sé porque eres así. Eres una puta así que no te hagas la decente conmigo. Yo también quiero beber de tus gordos pechos. Mira como me pones --lascivamente.
Aunque le duele como la trata, Feli lo mira con deseo. Héctor se agarra el paquete para que Feli vea lo gorda que la tiene.
--Nos vemos en unos días –dice divertido.
Feli está furiosa. No puede creer que Héctor pies en acostarse con ella cuando se está por casar con su hermana pero están sus padres, su hermana embarazada, además ama a Héctor. Se traga todo lo que siente.
La boda se realiza tal y como está previsto. Feli se muere de amor, de dolor al ver como su amado y su hermana se prometen amor eterno ante un sacerdote. En la fiesta, aprovechando que su madre se ha quedado con sus nietos, Feli va al lavabo. En seguida entra Héctor. Ella lo mira sofocada.
--¿¡qué haces acá?
Él la mira con cara de pervertido.
--¡mira cómo me has puesto¡ --dice sacando su gorda verga.
Él la besa y ella se deja arrastrar al wáter. Es un polvo rápido. Él se sube la cremallera mientras le dice con desprecio:
--¡Eres una puta de lo peor¡ ¡¡¿es que no respectas nada?¡ ¡¡me he casado con tu hermana, estamos en la boda? ¿¿¡qué clase de mujer eres?¡
Feli está triste y Héctor se le ríe:
--Estás enferma, eres una ninfómana, tranquila. Está noche vendrán más clientes ¿con diez tendrás bastante?
Feli está herida.
--¡que no vengan, no te quiero volver a ver¡
--eso no te lo crees ni tú. Ni se te ocurra dejarme mal. Me puedo llevar a los niños.
Feli se enfrenta a Héctor:
--¡Ni te metas con mis niños¡
--¡son mis hijos, tengo tanto derecho como tú¡
Feli se desespera:
--¿porqué me haces esto?
Héctor se le ríe. Le manda un beso:
--te espero a mi vuelta de la luna de miel.
Feli se queda triste. Llora. Se lava la cara. Vuelve a la fiesta. Busca a sus niños.
--ya me voy.
--pero hija, es una fiesta ¿porqué tan amargada? Mira tu hermana qué feliz es ¿qué pasa con tu hombre?
Héctor y Paula bailan felices. Feli se va herida con sus hijos quedando como una mujer envidiosa y amargada. A Héctor le gusta saber que una mujer sufre por él de esa manera, que lo ama de esa manera. Paula se siente una reina.
*(Mohamed es Nasser Saleh)
Días después… Feli quiere cambiar de vida. Ha cambiado la cerradura de su casa. No enciende su celular para que Héctor no la llame. Encuentra trabajo en un taller de costura y eso es algo que le hace ilusión. Siente que puede empezar de nuevo. Además entre sus compañeros de trabajo está un chico marroquí muy simpático y muy guapo. A ella le encanta su culo. Él se da cuenta y sonríe coqueto. Antes no lo habría dudado pero ahora es prudente. Se traga las ganas y siempre se va sofocada. Finalmente el chico se acerca a ella. Él quiere que salgan a cenar los dos solos pero ella aunque le apetece pues no quiere hablarles a sus padres de él. Luego de todos los errores del pasado teme el momento en el que tenga que Mohamed tenga que enfrentar a su familia.
--pues invito a merendar a tus hijos. --dice él muy dulce.
En los días siguientes, salen juntos y el chico no intenta ni besarla. Es todo un caballero. . Un miedo aparece en su mente:
--¿y si es gay? --piensa ella.
Así que mientras van a casa de la madre de ella a buscar a sus niños que se han quedado con la abuela, Feli se lanza y lo besa. El chico es lo que esperaba y se besan ardientemente. Justo en ese momento bajan de un taxi Héctor y Paula de su luna de miel Héctor se muere de la rabia. Paula se acerca a ellos.
--vaya, que sorpresa. Soy Paula --dándole dos besos.
El chico se presenta. Se muestra amable.
--Yo soy Mohamed.
Héctor se golpea los puños. Se enfrenta a Feli.
--¡es que encima te tiras a un moro¡
Mohamed se enfada.
--¿a quién llamas moro, imbécil?
Héctor lo empuja:
--¡a ti capullo¡
Los dos chicos empiezan a empujarse.
--¿ya sabes que estás con una puta que le encanta salir preñada de desconocidos? –Héctor.
Feli está desesperada. Creía que pueda olvidar a Héctor, ser feliz con Mohamed y ahora sus ilusiones se desvanecen.
--¡ayuda¡ ¡¡Paula, hay que separarlos¡
Feli trata de separarlos. Paula observa riendo. Feli trata de meterse en medio pero los chicos no hacen más que empujarse y Feli grita. Héctor aprovecha ese grito de suplica para humillar a Mohamed.
--¡¡eres una marica¡¡ ¡necesitas que te defiendan las mujeres.ahora creo que me equivoqué porque por muy puta que sea Feli no tiene nada que hacer con una mujercita como tú¡ ¡¡defiendete, maricon¡
Ofendido con las palabras de Héctor , Mohamed se le tira encima. Es la oportunidad que quería Héctor. Aunque es Mohamed quien recibe todos los golpes, ante el padre de Feli y Paula Mohamed queda como el culpable.
--¡Yo solo estaba defendiendo a Feli¡ --Héctor.
A empujones echa a Mohamed de las cercanías de la casa.
--¡Moro de mierda si te vuelvo a ver llamo a la policía¡--padre.
Mohamed se va herido de lama y cuerpo. Feli está desesperada:
--¡todo fue culpa de Héctor¡¡él empezó.
--porque no quiere que te vayan a abandonar con otra barriga.¡ --dice el hombre con desprecio-- ¡¡parece que te gusta que los hombres te usen y te dejen preñada¡
Juliana riñe a su marido pero don Pablo dice:
--¡¡yo no tengo la culpa que tu hija sea un pendón¡
Juliana y Pablo, los padres de Feli y Paula.
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