Capítulo 19

Emilio espera ansioso la llegada de Héctor, le parece un sueño tenerlo con él. Marcos le advierte.
--odia a los gays, él no se acostará contigo por mucho que le pagues, antes se muere de hambre.
Y eso es algo que le da mucha pena a Emilio.
--lástima que no sea como tú. Te veo en la noche.
Marcos se siente incómodo. Le da asco ese hombre pero le paga demasiado dinero y quiere lo mejor para su hijo.
No es Emilio el único revolucionado por la presencia de Héctor, a la joven empleada se le van los ojos. Héctor se pone uniforme y tanto Emilio como la chica se excitan imaginándoselo en bóxers.





Días después…





Al rato, Héctor está en el almacén, colocando unas cosas en la nevera. Se siente más tranquilo porque no tiene los ojos de Emilio clavados en su trasero.
--así sí da gusto trabajar –dice Héctor para sí.
Emilio lo sabe dentro y no tarda en acercarse. Emilio trata un acercamiento con Héctor. Sabe que ya que es su jefe pues no le puede contestar mal.
--¿te puedo hacer una pregunta?
--depende –Héctor a la defensiva.
Emilio está ardiendo por tener al guapísimo chico delante.
--Si no quieres no me conteste, simplemente es para conocerte. ¿tienes pareja?
--¿no te parece muy personal?
Héctor no sabe bien porque le hace la pregunta, se muestra distante. Emilio se disculpa.
--No te quería molestar, era por decir.
Emilio en realidad quiere saber si es gay, si tiene novia. Héctor se lo piensa mejor, sí, que Emilio sepa que no tiene posibilidades con él.
--Estoy casado prácticamente… vivo con una chica… --miente—No sé si sabes que soy padre.
Emilio no puede evitar sentir un poco de tristeza, de celos. Sabe que no tenía posibilidades con él, le gustaría estar en el lugar de la novia.
--¿Y qué pasa con Aaminah ? No sois nada? Pues hacéis bonita pareja…
Héctor no le da importancia. Aaminah lo ha escuchado porque se estaba acercando al almacén y suspira enamorado. Héctor no la ve pero ella sí oye como dice:
--No, que va. Aaminah es como una hermana para mi.
La joven se desanima aunque no quiere que nadie se dé cuenta y menos Héctor, no quiere hacerlo sentir mal.
--Pues nada si ya tienes novia pues no pasa nada… pero os lleváis tan bien que yo pensaba… bueno es cosa tuya. Igual que sepas que no me molestaría que tuvieras algo con una compañera de trabajo…
Héctor le sonríe:
--vale, pues gracias.
Emilio le ha querido demostrar que lo que más quieres es que sea feliz, que no se mete en su vida, que se conforma con estar a su lado. A Héctor le calma ver que a Emilio le parece bien que tenga algo con Aaminah .
--Eso será que no quiere nada conmigo… lo he malinterpretado –dice para sí.
Héctor ve a Aaminah una buena amiga. Le cuenta casi todo.
--¿sabes que me ha dicho el jefe? –dice divertido—que si quiero puedo tener algo contigo. Que loco, ¿no?
Aaminah hace que se lo toma a broma aunque en realidad está muy triste. Al rato llega Marcos Héctor mira de reojo a Emilio.
--No sé si voy a poder trabajar así. Este quiere conmigo…
--No le hagas caso. No te dirá nada.
Héctor confía que las cosas sean así.
----Le he dicho que tengo novia. Espero que me deje tranquilo pero no me gusta como me mira.
Marcos espera por el bien de los dos que no sea así sea. Si Emilio se encapricha de Héctor y Héctor no le hace caso pueden quedarse los dos en la calle. Héctor le lanza una mirada desprecio a Emilio para que ni se le ocurra pensar en él como hombre. Emilio mira de reojo a los dos amigos . Aunque Héctor es su favorito no puede negar que Marcos es muy atractivo y como no quiere problemas pues se conforma con disfruta del tierno cuerpo del pelirrojo. Así que tras la mirada de Héctor desvía la mirara y tiene claro que aprovechará los días de fiesta de Héctor para hacer fiesta él también. Quiere estar todo el rato junto a Héctor y se dará libre cuando no esté Héctor.

Por otro lado, Aaminah , la chica que habitualmente está en la heladería, tiene su día de fiesta. Comparte piso con una amiga.
--ay chica, ¿Cómo se puede tener esa cara de amargada teniendo día de fiesta?
Aaminah suspira.
--Es que hecho de menos a Héctor.
--¡pero será porqué no pasas tiempo a su lado… chica, descansa un día¡
Aaminah disfruta mucho de su trabajo porque le gusta tener la compañía de Héctor.
--Es que nunca me gustó un chico como él.
--¿Y porque te acuestas con ese viejo…? –le reprocha la amiga.
Ni la propia Aaminah lo sabe:
--No sé lo vi a los ojos y vi a Héctor en ellos…
--Es una tontería… --la amiga riendo.
La propia Aaminah se extraña de lo que dice:
--Lo sé, no me preguntes porqué pero cada vez que lo veo pues me siento como si estuviera con él…
La chica se burla de Aaminah , no la toma en serio. Cree que es una excusa para acostarse con un hombre mayor y seguramente casado.
--Se llama como él pero no es Héctor, es un viejo que seguro está casado…
--¿¿Cómo crees que va a estar casado? ¡me lo hubiera dicho¡
--Y si te gusta tanto Héctor porque no se lo dices… --comenta la amiga sorprendida de la pasividad de Aaminah .
--Porqué él me ve como una amiga. Nada más. Yo sé que no me puede ver como mujer… --resignada.
--¡Pues ni que fueras fea… si yo fuera tío no te dejaría escapar…¡
--Como eres Gina…¡¡
Almenos Gina ha logrado hacer sonreír a su amiga.
--Digo la verdad… a ver si espabilas…
Aaminah está totalmente resignada, sabe que no puede tener nada con su guapo amigo y se conforma en eso, en que siga siendo su amigo.
--Pero él tiene novia… ¿lo olvidas?
Gina no ve que eso sea un problema porque está acostumbrada a pasar por encima a todo el mundo.
--¿y? si se quiere meter en tu cama… ¿Cuál es el problema?
Aaminah siente algo muy especial por Héctor.
--jamás sería una de esas amigas con las que ellos se desahogan, para mí Héctor no es eso…
Gina se excita pensando en tener sexo con Héctor.
--pues eres una tonta porque Héctor es uno de los hombres más guapos que he conocido para no decir el que más y mira que he conocido hombres, desde luego si tuviera la oportunidad es que no dudo en hacérmelo con él.
Aaminah se muestra celosa.
--¿¿¡es que te gusta Héctor?¡
--¿y quien no? ¡¡si está buenísimo, es un lujo estar con él¡ --Gina excitada.
Aaminah se muere de los celos.
--¡¡que tiene mujer, no se te olvide¡
Gina se le ríe:
--que tiene 20 años, que se te olvide, a esa edad los chicos sólo buscan sexo…
--¿y eso que quiere decir? –Aaminah a la defensiva.
--venga, nada… --Gina burlona.
--¡Júrame que no vas a tener nada con él…¡ --exige Aaminah enfadada.
--pero chica ni que fuera tu novio… --Gina riendo.
--¡es que tú eres su novia y eres capaz de meter en su vida solo para trastornarlo¡ ¡¡te gusta meterte en medio de la parejas y luego desaparecer¡
--Yo, --dice con ironía—sí que eres mala, ¿Cómo crees que yo haría eso?
Pero se ríe. Aaminah sabe que Gina disfruta jugando con los hombres y no quiere que Héctor sea una de sus víctimas. Al ver que su amiga está molesta, Gina dice:
--Tranquila, te juro que no me acercaré a él.
Aaminah se queda más tranquila:
--pero como se me acerque él… --piensa Gina excitada.